Unos 300 extrabajadores del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) se apostaron en los exteriores del edificio Zarzuela, en Quito, para reclamar por el pago justo de sus indemnizaciones.
Se trata de varios exservidores que, entre 1999 y 2002 fueron separados de la institución, cuando laboraban bajo el Código de Trabajo y luego pasaron a la Ley Orgánica de Servicio Civil y Carrera Administrativa, lo que actualmente se denomina Ley Orgánica de Servicio Público (Losep).
Teresa Montoya, quien trabajó por más de 20 años en la entidad y fue despedida en el 2001, reclama la entrega de las correspondientes indemnizaciones, las diferencias salariales y el acta de finiquito. “Tenemos 14 años en la lucha”.
El procurador general del IESS, Cristian Hidalgo, sostiene que ya no cabe su reclamo, porque hubo un trámite administrativo y que lo procedente es presentar una demanda ante la Corte Constitucional. “Ha sido ratificado en varias sentencias y por varios jueces, la supresión de puestos no se asimila a un despido intempestivo, por lo tanto declaró ilegal varios procesos que ellos mismos ya judicializaron”.
Los extrabajadores, oriundos de Guayas, Manabí y El Oro, continuarán de manera indefinida con la medida adoptada en la capital.