Luego que el gobierno puso fin al comodato del edificio que ocupa la Conaie desde 1991, en la capital, la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador se acoge al derecho a la resistencia, y ratifica que no saldrá de su sede en Quito.
Los dirigentes de la organización indígena se instalaron este martes en Asamblea General, precisamente en su histórica sede, ubicada en el norte de Quito, que deberán desalojar máximo hasta el próximo 6 de enero.
Blanca Chancoso, representante indígena, anunció la decisión tomada por la dirigencia. “No vamos a salir, sabemos que tenemos derecho tal vez a algo mejor, a otro espacio más amplio, a todo eso tenemos derecho”.
Pero según el expresidente de la Conaie, Leonidas Iza, la lucha va más allá de defender la pertenencia de un edificio, sino también por su desacuerdo con las políticas agrarias del Gobierno. “La ley de Tierras que para nosotros está prácticamente enrolado con el Tratado de Libre Comercio”.
Por el momento, el sector indígena se declaró en emergencia.
Y por esta razón varios sectores sociales se unieron a su lucha. A la Asamblea asistió el presidente de la Confederación de Trabajadores del Ecuador, Édgar Sarango. “No se trata de una confabulación, se trata de presentar nuestra solidaridad, seguir impulsando acciones que lleven al Gobierno Nacional a rectificaciones en cuanto a su política”.
En las próximas horas, la Conaie hará públicas las resoluciones de la Asamblea General.