Jamie Lee Curtis se pronuncia contra los estereotipos y decide dejar de "sumir el estómago"
Aunque cada vez son más las mujeres que levantan su voz en busca de ponerle un fin a los estereotipos de belleza impuesto por la sociedad, no es un secreto que estos continúan presentes. Es por ello que la famosa actriz estadounidense, Jamie Lee Curtis, decidió unirse a la protesta contra los cánones y dejar de sumir su estómago.
A través de una publicación en su cuenta de Instagram, la intérprete envió un fuerte mensaje con respecto a su posición, misma que fue evidenciada mediante su protagónico en la nueva película ‘Everything Everywhere All At Once’, la cual sigue a una inmigrante china, dueña de una lavandería fallida y de una vida bastante desordenada, por lo que una agente, interpretada por Curtis, la audita, pero, por extrañas razones, la protagonista se ve en una realidad alterna en la que debe salvar su vida y pagar sus impuestos.
“En el mundo hay una industria de mil millones, billones de dólares, sobre ocultar cosas. Correctores. Moldeadores de cuerpo. Rellenos. Procedimientos. Ropa. Accesorios para el cabello. Productos para el cabello. Todo para ocultar la realidad de quienes somos. Y mi instrucción para todos fue: quiero que nada se oculte”, escribió la artista junto a una fotografía en la que se la observa caracterizada del personaje que interpretará en la nueva producción.
Curtis continuó su mensaje en redes sociales, y afirmó su decisión por liberar cada músculo que había ocultado durante años: “Llevo metiéndome el estómago desde que tenía 11 años, cuando empiezas a ser consciente de los chicos y los cuerpos, y los jeans son súper ajustados. Decidí muy específicamente renunciar y liberar cada músculo que tenía y que solía apretar para ocultar la realidad. Ese era mi objetivo. Nunca me había sentido más libre creativa y físicamente”.
Esta no es la primera vez que la actriz se pronuncia sobre la naturalidad de su cuerpo. Anteriormente criticó las cirugías estéticas durante una entrevista con Fast Company, y mencionó que la adicción actual a estas, al igual que los filtros digitales,” están acabando con generaciones de belleza".
Curtis admitió haberse realizado varios retoques estéticos en el pasado, los cuales “no le funcionaron”, y la volvieron “adicta al Vicodin". Tras 22 años sobria, la intérprete continúa levantando su voz en contra de los procesos que prometen embellecer o cambiar la apariencia de las personas, con respecto a las presiones y estereotipos sociales.
