Industria de alimento balanceado mueve la economía de varios sectores
De acuerdo con la onceava encuesta anual sobre la producción de alimento balanceado efectuada por Alltech, en el 2021 el tonelaje mundial de este insumo aumentó 2,3 por ciento, con una elaboración de 1.235 millones de toneladas métricas (TM).
Ese mismo año, América Latina experimentó un crecimiento de 0,5 por ciento en su producción, manteniéndose Brasil como líder de la región con 80 millones de TM, y tercero a nivel mundial, después de China (261 millones de TM) y Estados Unidos (231 millones de TM). Si bien Ecuador no encabeza la lista en la región como productor, su participación en este segmento tiene una gran importancia para la economía nacional, gracias al encadenamiento productivo que genera.
En el país se estima que hay 206 empresas dedicadas a la fabricación de alimento de distintas especies. Las ventas anuales del sector, asegura el director ejecutivo de la Asociación de Productores de Alimentos Balanceados (Aprobal), Jorge Josse, generan 3.550 millones de dólares, de los cuales un 60 por ciento corresponde a dietas pecuarias (pollo, cerdos, huevos y ganado) y un 40 por ciento a camarón.
En el 2021, Ecuador produjo 4’729.614 toneladas de balanceado, siendo las líneas de mayor demanda la de aves y camarón. El directivo señala que los productores de balanceado formal absorben el 74 por ciento del total de maíz que industrializa el país anualmente, que es de aproximadamente 1,35 millones de toneladas y está valorado en 500 millones de dólares.
“De todo ese volumen de maíz, la industria formal absorbe un millón y los 350 mil restantes son absorbidos por los productores informales e independientes de pollo, cerdo y ganado, así como por otros sectores e industrias que también utilizan maíz para consumo humano directo en harinas, maicenas y snacks”, explica Josse.
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Impacto
El peso de este sector se observa en el encadenamiento productivo que tiene. Solo en plazas de trabajo se generan alrededor de 18.000 empleos directos y 9.000 indirectos. Aprobal resalta que tomando en cuenta que la producción de maíz nacional depende también de este segmento, se podrían sumar las más de 200.000 personas involucradas en el cultivo del cereal.
El titular del gremio enfatiza que esta industria es fundamental para la seguridad alimentaria del país, pues sin sus productos no sería posible producir la proteína animal y tampoco la elaboración y exportación de camarón. “Todas las especies animales que se producen necesitan de alimentos balanceados”, remarca.
Con él coincide Regner García, gerente general de Industrial Avícola Junín, en su caso particular estos piensos tienen una gran incidencia en la calidad de los huevos y carne de pollo que comercializa.
Esta empresa se dedica hace varios años a elaborar alimento balanceado para gallinas ponedoras en todas sus fases, el mismo que sirve completamente para autoabastecer su operación.
“Los insumos avícolas en su gran mayoría son de la localidad, tales como el maíz, polvillo, afrechillo, carbonatos. La soya es adquirida a través de la Asociación de Fabricantes de Balanceados, quienes se encargan de la importación”, afirma.
El año pasado la producción de Industrial Avícola Junín fue de 1.500 toneladas métricas, la cual se estima se mantendrá este 2022.
Tecnología
La industria nacional de alimentos balanceados ha perfeccionado su tecnología, al punto que Ecuador se ha vuelto un referente en el ámbito internacional. Aprobal resalta que las empresas productoras de alimentos para camarones, por ejemplo, son reconocidas por su eficiencia en toda la cadena de abastecimiento y producción.
Sus principales avances se han orientado a la hidroestabilidad, digestibilidad de la proteína y al calibre del pellet. A nivel de proceso, existen progresos en los sistemas de pre acondicionamiento de la materia prima para asegurar su higienización, desdoblamiento y aprovechamiento.
En cuanto a su análisis, la tecnología NIR (infrarrojo cercano) permite analizarla en menor tiempo, incluso durante el proceso. Actualmente, el sector trabaja para que las tecnologías y procesos se enfoquen en lograr ciclos de producción más eficientes y productivos para las distintas especies animales, y para que haya más versatilidad en el uso de materias primas.
*Lea más temas de esta industria en Revista Enfoque de Vistazo. Ya en circulación.
