¡Adoptando un amigo!
La llegada de una mascota a casa siempre es algo que trae consigo felicidad, y la mejor manera de hacerlo es adoptar a un perro o gato que deseen formar parte de una familia.
Una mascota en casa es una responsabilidad, pero también está comprobado científicamente que traen beneficios para la salud de sus humanos. Un perro o un gato siempre serán buena compañía, y nada mejor que adoptar.
Existen varias fundaciones, refugios y personas independientes defensoras de los animales en situación de calle que, desde hace mucho tiempo ya, trabajan para salvarlos y buscarles una familia a fin de que no deambulen sin protección, expuestos a los peligros de la calle, enfermedades, maltratos y más.
Muchas de estas mascotas son recogidas en condiciones lamentables, por lo que su recuperación requiere de una inversión y paciencia.
Por ello los rescatistas siempre realizan eventos, mingas, ventas de dulces o productos para mascotas y hasta solicitan ayuda a la ciudadanía para seguir procurándoles su bienestar a los rescatados.
Generalmente la adopción procede una vez que las condiciones de salud de las mascotas sean ideales.
Esterilización
En algunos casos las mascotas son entregadas ya esterilizadas a sus nuevas familias y, en el caso de los cachorros, siempre que se comprometan a la esterilización no solo de la hembra, sino de ambos géneros.
Este punto es beneficioso para evitar crías indeseadas y la sobrepoblación con el inminente riesgo de los abandonos y la proliferación en las calles.
La esterilización incluso ayuda en el comportamiento, ya que se hacen más caseros. Los gatos se vuelven más dóciles, no escapan de casa por estar en celo y son más aseados ya que no marcan territorio. Los veterinarios incluso indican que la esterilización también ayuda a prevenir enfermedades, como infecciones uterinas y el cáncer de mama.
Por el lado canino, se suele recomendar la castración o estilización entre los seis y los doce meses de edad, aquí influyen factores como la raza y el tamaño. Mientras que en los felinos, el procedimiento se puede dar antes de que alcancen su madurez sexual, entre los cuatro y seis meses de edad.
Lo ideal es consultar con su médico veterinario para la valoración de cada mascota.
Vacunas
Así como las personas, los perros y gatos también necesitan tener sus esquemas de vacunas completos para prevenir peligrosas enfermedades. La más común es la antirrábica, que se puede conseguir de forma gratuita en los dispensarios del Ministerio de Salud Pública.
Vacunas para perros
A las 6 semanas: Séxtuple, primera dosis, previene el parvovirus, moquillo, hepatitis, parainfluenza, leptospirosis, coronavirus.
A las 9 semanas: Séxtuple, segunda dosis, previene el parvovirus, moquillo, hepatitis, parainfluenza, leptospirosis, coronavirus.
A las 12 semanas: Séxtuple, tercera dosis, previene el parvovirus, moquillo, hepatitis, parainfluenza, leptospirosis, coronavirus.
A las 16 semanas: Antirrábica, previene la rabia.
Vacunas para gatos
A las 9 semanas: Triple felina, primera dosis, previene la panleucopenia, calcivirus, rinotraqueitis.
A las 12 semanas: Triple felina, segunda dosis, previene la panleucopenia, calcivirus, rinotraqueitis.
A las 16 semanas: Antirrábica, previene la rabia
-Tras el esquema inicial de estas vacunas, perros y gatos deberán tener su refuerzo anual durante el resto de su vida.
Control veterinario
Es importante que al menos una vez al año cada mascota sea sometida a chequeos regulares, aunque se vea saludable. La importancia de estas revisiones es incluso más necesaria cuando son cachorros, si las hembras están preñadas o son perritos mayores de 10 años.
En muchas ciudades, los Municipios colocan puestos de atención veterinaria. Allí se realizan campañas gratuitas de atención, cirugías, desparasitaciones, vacunación y esterilizaciones.