Bebé: piel delicada
Es tan suave y tersa, y a la vez tan fina, en algunos casos hasta el 30% más fina que la de un adulto. Por eso, es más sensible y demanda cuidados especiales.
Además de su delicadeza, el pH de la piel de los pequeñitos es neutro, mientras que el de los adultos es ligeramente ácido. La capacidad de regulación de la temperatura es inmadura, por ello les afectan el exceso de calor o de frío. También tienen menor capacidad de producción de melanina y como consecuencia, hay que cuidarlos mucho de la exposición solar, teniendo en consideración que hasta los 6 meses de vida, no es aconsejable el uso de ningún protector solar.
También durante el primer tiempo puedes notar que su piel es grasosa, pues el bebé todavía tiene algo de carga hormonal que le transmitió su madre en la gestación, bajando esto a partir de los 2 meses de nacido.
Te contamos cuáles pueden ser las principales afectacione cutáneas que puede experimentar tu bebé:
Urticaria del recién nacido: Es una erupción que se presenta entre un 30 y un 50 % de los neonatos. Se presenta a través de pequeñas lesiones, generalmente en el tronco, aunque puede extenderse al resto del cuerpo. Suele durar algunas horas y desaparecer.
Costra láctea: Conocida también como dermatitis seborreica infantil, es una enfermedad inflamatoria, que se presenta con mucha frecuencia en las primeras semanas de nacido, y se ocasiona por una excesiva producción de las glándulas sebáceas, y como consecuencia de las hormonas maternas todavía presentes en el organismo del bebé. Se produce con enrojecimiento y escamas amarillas en el cuero cabelludo, las cejas y las mejillas del neontao, y en pocos casos puede extenderse hasta pliegos de brazos y piernas. No causa ninguna molesta y en un par de semana desaparece.
Acné neonatal: Se presenta usualmente en los primeros 30 día del bebé, son granitos rojos, algunos con una puntita blanca, y se da en frente, barbilla y mejillas. También está vinculada con la carga hormonal de la mamá, y por ello, desparece en muy poco tiempo.
Dermatitis atópica: Es una enfermedad inflamatoria, que se manifiesta en un 20% de los bebés, a través debrotes que van y vienen, la piel se pone muy seca, tiene placas rojas y rugosas, que producen picazón y molestias, alterando el descanso y hasta el apetito del pequeño, en caso más severos. Las zonas de mayor afección son la cara, el cuello y las extremidades. Cuando la padecen, la capacidad de ser barrera que tiene a piel, se altera.
Dermatitis del pañal: Es una dolencia común en bebés de 4 a 15 meses. Se manifiesta con irritación, inflamación y enrojecimiento en la zona del pañal, asociada con el contacto prolongado de la delicada piel del menor, con orina y heces. Se debe a la presencia de urea en la orina, que se transforma en amoniaco, el que irrita mucho la piel, siendo la presencia de humedad lo que desencadena la enfermedad. En el caso de las heces, también tienen cambios en su composición originados en la alimentación y la salida de los dientes, que produce irritación en la piel del bebé.
ALGUNAS RECOMENDACIONES
Sabemos que no es bueno atomedicarse, y más en el caso de un bebé, así que ante cualquier manifestación extraña en la piel del niño, debes consultarlo con el pediatra, quien luego de revisar las lesiones y conversar con la mamá, diagnosticará y enviará el tratamiento adecuado.
En tu rutina diaria de cambio de pañal, es aconsejable que consideres la revisión constante del pañal, para detectar cuando esté demasiado cargado y la humedad a la que se expone la piel del bebé sea excesiva. También, aplicar en cada cambio, una crema antipañalitis que, en general, contiene diferentes concentraciones de óxido de zinc para protegerlos de irritaciones.
En el caso de que la irritación se mantenga por más de 3 día, aparezca pus, fiebre o llagas, llévalo enseguida al pediatra, es posible en esos casos, que las lesiones se hayan infectado (bacteria u hongo) y que demande un tratamiento específico.