Gobierno fusiona ministerios e inicia desvinculación de cinco mil funcionarios públicos
Los funcionarios que serán despedidos estaban "obstruyen el trabajo eficiente" del Estado, según dijo la vocera de Carondelet.
La vocera de Carondelet, Carolina Jaramillo, anunció este jueves que el Gobierno ha iniciado un plan de eficiencia administrativa para modernizar el Estado ecuatoriano. Por ello, desde hoy se ha comenzado con procesos de desvinculación de cinco mil funcionarios públicos.
El programa consiste en tres puntos clave: evaluación permanente y rigurosa de los funcionarios públicos, abrir oportunidades para los jóvenes que deseen trabajar en el Estado y reorganización del Ejecutivo a través de los ministerios.
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Es así que se fusionan ministerios de 20 a 14 y las secretarías pasan de nueve a tres. Lo que significa que se reduce en un 41% el número de carteras de Estado.
“El Gobierno se ha planteado tener un estado eficiente”, dijo Jaramillo en rueda de prensa.
Agregó que se ha empezado un proceso de transición y que en los próximos meses se abrirá un concurso con nuevas vacantes para vincular a jóvenes que quieran participar en el servicio público.
Jaramillo también aclaró que entre los despedidos no habrá médicos, enfermeros, policías, militares, ni personas que están en grupos vulnerables.
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¿POR QUÉ LOS DESVINCULAN?
La vocera de Carondelet explicó que las desvinculaciones no están relacionadas con procesos de evaluación como lo estipula la reciente Ley de Integridad Pública, sino que los despedirán con una “mirada de optimización del Estado”.
La mayoría son personas de la función ejecutiva (ministerios) y del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) con cargos administrativos.
Agregó que hay informes de cada institución en los que se muestra que estos empleados “no estaban sumando o cumpliendo como debían”.
Sobre las liquidaciones, explicó que dependerá de los puestos ya que algunos tienen nombramientos provisionales y otros contratos ocasionales.
Por otro lado, dijo que en pocos meses se abrirá una convocatoria para llamar a jóvenes al sector público, siempre y cuando cumplan con parámetros de excelencia.
Pero especificó que no se despiden cinco mil funcionarios para meter a otros cinco mil, sino que serán vacantes específicas, según considere cada entidad del Gobierno.