Cynthia Erivo es acusada de tener una 'obsesión' con Ariana Grande y esto fue lo que respondió
La actriz revela cómo ambas negociaron juntas sus contratos para proteger su bienestar laboral.
La actriz Cynthia Erivo volvió a hablar públicamente sobre la conexión especial que mantiene con Ariana Grande, su compañera en las películas de Wicked. Su vínculo, que ha sido tema de conversación en redes sociales por la intensidad del afecto que muestran en público, ha generado debates sobre si se trata de una amistad profundamente auténtica o de una dinámica diseñada para la promoción mediática.
En una reciente entrevista, Erivo contó que la química con Grande fue inmediata. “Nos sentamos a conversar durante cinco horas... nos conectamos de inmediato”, recordó. Según la actriz británica, ese primer encuentro marcó el tono de una amistad que ha crecido en medio de largas jornadas de grabación, giras promocionales y compromisos compartidos.
Lee también: Científicos revelan el sorprendente impacto que una noche sin dormir deja en el cerebro
Erivo explicó que ambas suelen caminar tomadas de la mano. “Si no es así, me pregunto ‘¿dónde estás?’”, reveló, subrayando que su comunicación es frecuentemente física y no siempre depende de las palabras.
El lazo no solo es personal. Erivo también confirmó que ella y Grande negociaron juntas sus contratos para Wicked, con el objetivo de que sus necesidades profesionales estuvieran alineadas desde el inicio. Para ambas, ese acompañamiento representó una forma de garantizar que su bienestar fuera prioridad durante el exigente proyecto cinematográfico.
Lee también: 'Wicked: Por Siempre' llega a Ecuador: Lo que debes saber antes de verla
A lo largo de la gira promocional, el público ha visto constantes abrazos, caricias y complicidad entre las protagonistas. Estos gestos han generado interpretaciones encontradas en redes: algunos celebran su cercanía como un ejemplo de apoyo entre mujeres; otros la consideran excesiva o incluso parte de una estrategia publicitaria.
Frente a los comentarios, Cynthia Erivo ha sido clara: la conexión es real. “Decidimos protegernos mutuamente... ser amables la una con la otra”, afirmó. También explicó que su forma de comunicarse —a veces mediante gestos sutiles cuando las palabras no bastan— es parte de un código emocional que construyeron en confianza.