Robert Pera: la historia de un ‘nerd’ que hoy es el dueño más joven de una franquicia de la NBA

Carolina Farfán
Robert Pera

Robert Pera es el dueño más joven de una franquicia de la NBA. La historia de un ‘nerd’ que hoy es dueño de una fortuna.
 
Está en el puesto 208 de la lista de billonarios de este año que publica Forbes, con un patrimonio de 7 mil millones de dólares. Apenas tiene 42 años pero ya ha cumplido varios de los sueños que tenía desde chico, dos de ellos los más importantes: tener un negocio tecnológico y ser dueño de un equipo de la NBA, la liga profesional de baloncesto en EE.UU.
 
Robert Pera tiene una historia de guion fantasioso. Nació y creció en el estado de California, la meca de la tecnología, donde “suceden las cosas”, donde está Silicon Valley, ese escenario donde Pera quería protagonizar su mejor papel.
 
Un rol protagónico que tomó después que no pudiera jugar baloncesto al detectarle una enfermedad cardíaca cuando jugaba en la secundaria. Fue lo único que lo limitó en su vida. Por eso se enfocó en su otra pasión y ya a los 18 años proveía servicios de conectividad a Internet a negocios locales.
 
Sacó un título en Ingeniería Eléctrica y en japonés en la Universidad de California, en San Diego. También perfeccionó ese idioma en Tokio, cuando asistió a la Universidad Sofía. Tres años después llegaría su primer sueño: ingresó a la empresa Apple como ingeniero de Hardware, cargo que tuvo por dos años. “Mi ídolo era Steve Jobs”señalaba en algunas entrevistas.
 
Pera testeaba equipos para conexión de Internet vía remota (Wi-Fi) y de esa forma saber si cumplían con el estándar. En el camino descubrió una mejora en el producto y lo avisó en la empresa. No lo tomaron en cuenta. “Hay un gran mercado que recién está empezando pero que nadie conoce”, comentaba en su momento. 
 
Se endeudó por 30 mil dólares en su tarjeta de crédito para armar su proyecto. Renuncia a Apple e inició su emprendimiento, Ubiquiti, una plataforma tecnológica con la que vendió en ese arranque 4 mil unidades de su primer producto, con una ganancia de 200 mil dólares.
 
Cinco años después, las ventas superaban los 137 millones de dólares, y este año ya llegaron a 1.300 millones. Pasó de 50 colaboradores a más de mil.
 
Con su vida resuelta, fue por su otro sueño: compró el equipo Memphis Grizzlies, del estado de Tennessee, que juega en la división Suroeste de la NBA, por 377 millones de dólares, convirtiéndose en el dueño más joven en esta competencia, con 42 años. Hoy ese equipo vale 1.300 millones de dólares, es decir, más del 200 por ciento del precio al que lo compró. “Algunas personas compran yates; esto (comprar un equipo de la NBA) era lo número uno que tenía en mi lista”.