Más de cien militares inician formación para convertirse en nuevos comandos de las FF.AA.
La futura plantilla de comandos comenzará su entrenamiento en el marco del despliegue de 2.000 militares hacia las provincias de Guayas, Manabí, El Oro y Esmeraldas.
Con más de 2.000 horas de entrenamiento intensivo, 114 militares de la Fuerza Terrestre y la Fuerza Aérea Ecuatoriana han iniciado este martes el Octogésimo Primer Curso de Comando, considerado la máxima escuela de disciplina y exigencia militar del país.
Lea también | Ejército abre inscripciones para especialistas: estos son los profesionales requeridos
Este proceso de formación busca forjar a los futuros integrantes de las fuerzas especiales, capaces de operar en condiciones extremas para preservar la seguridad en Ecuador.
Los soldados que apuntan a ser comandos son sometidos a pruebas físicas, psicológicas y técnicas, diseñadas para preparar a los más aptos en varios tipos de operaciones.
En las fases de entrenamiento incluso se llegan a simular escenarios de guerra y emboscadas, tanto en terrenos selváticos como desérticos y urbanos.
Dos mil militares manchan entretanto
La futura plantilla de comandos comenzará su entrenamiento en el marco del despliegue de 2.000 militares hacia las provincias de Guayas, Manabí, El Oro y Esmeraldas, como parte de la estrategia para enfrentar a grupos de crimen organizado que se dedican principalmente al narcotráfico, la minería ilegal y el tráfico de armas.
Eso, por su lado, ocurre durante el "conflicto armado interno" aún vigente, dispuesto por el mandatario Daniel Noboa en enero del año pasado, para enfrentar a las bandas de crimen organizado, a las que pasó a denominar como "grupos terroristas".
Lea también | Crimen en urbanización de Chongón: sujetos vestidos como policías asesinaron a dos personas mientras dormían
En la primera mitad del 2025, Ecuador registró más de 4.600 homicidios, según cifras oficiales. Expertos consideran que este es el inicio de año más violento que ha vivido el país en su historia reciente.
Solo en la provincia de Guayas, que ha sido la más golpeada en la espiral de violencia de este año, se registraron más de 1.200 asesinatos entre enero y marzo.