Emilie Kiser no se encontraba en casa cuando se ahogó su hijo de 3 años
La influencer pide que no se divulguen videos ni documentos del caso, al considerar que contienen detalles “gráficos e íntimos” del accidente.
La influencer estadounidense Emilie Kiser atraviesa el momento más devastador de su vida tras la muerte accidental de su hijo Trigg, de tres años, quien se ahogó en la piscina de su hogar el pasado 18 de mayo. Mientras aún se investigan las circunstancias del trágico incidente, Emilie ha solicitado formalmente a la corte de Arizona que se mantengan sellados todos los registros relacionados con el caso, incluidos los videos del momento del accidente.
En su petición, Kiser argumenta que la divulgación de este material expondría al público a "detalles gráficos, angustiosos e íntimos" del fallecimiento de su hijo, algo que considera inadmisible en medio de su duelo. Según documentos judiciales, Emilie no se encontraba en casa cuando ocurrió el accidente y su hijo fue hallado inconsciente en la piscina familiar.
El abogado de la influencer indicó que la familia busca vivir su duelo en privado y expresó su preocupación por el manejo mediático del caso. “Este es el momento más traumático de su vida y no debe convertirse en un espectáculo público ni viralizarse en redes sociales”, dijo.
La solicitud subraya el impacto emocional que esta tragedia ha tenido en Emilie, quien además es madre de un bebé recién nacido, Theodore, de apenas dos meses. “Cada día es una batalla”, indican los documentos legales, mientras la joven madre intenta sobrellevar el dolor por la pérdida de su primogénito y, al mismo tiempo, estar presente para su hijo menor.
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Mientras tanto, las autoridades continúan investigando el suceso. La familia Kiser, conocida en redes por compartir su vida cotidiana con miles de seguidores, ha optado por el silencio y ha pedido respeto a su privacidad en este momento de inmenso dolor.
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