La Policía Nacional descubrió a un tigrillo que permanecía retenido ilegalmente por dos presuntos integrantes del grupo de delincuencia organizada Los Tiguerones, en medio de un operativo emprendido en el sector Unión de Bananeros, en el sur de Guayaquil.
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Los uniformados que hallaron a la especie, clasificada como en riesgo de extinción por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), se habían desplegado al sitio ante la presunción de que un delito de receptación de dinero estaba en curso.
Los dos presuntos miembros de la agrupación delictiva fueron aprehendidos y puestos a órdenes de las autoridades judiciales. Además, la Policía Nacional recuperó una motocicleta que había sido reportada como robada.
En una imagen difundida por las autoridades se observa al tigrillo, visiblemente estresado dentro de una jaula de transporte. Se prevé que las autoridades ambientales evalúen su estado de salud para coordinar su posterior reinserción en el bosque seco tropical, si es que esta aún posee la capacidad para sobrevivir por su cuenta.
El hallazgo del felino vulnerable se dio luego de que la Policía encontró un mono que permanecía enjaulado, el pasado 4 de junio, durante un operativo en Puerto López, en la provincia de Manabí, en el que también fueron incautadas armas, drogas y dinero en efectivo.
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El tráfico y tenencia ilegal de animales silvestres está penalizado en el artículo 247 del Código Orgánico Integral Penal: “La persona que cace, pesque, tale, capture, recolecte, extraiga, tenga, transporte, introduzca, almacene, trafique, provea, maltrate, se beneficie, permute o comercialice, especímenes o sus partes, sus elementos constitutivos, productos y derivados, de flora o fauna silvestre terrestre, marina o acuática, de especies listadas como protegidas por la Autoridad Ambiental Nacional o por instrumentos o tratados internacionales ratificados por el Estado, será sancionada con pena privativa de libertad de uno a tres años”.