¿Bienvenido 2023?

Alberto Acosta-Burneo

Estamos a las puertas de un nuevo año. ¿Qué sorpresas nos traerá? En materia económica la gran interrogante es si se concretará una tan temida recesión en las economías desarrolladas. El 63 por ciento delos economistas consultados por The WallStreet Journal considera que EE.UU. entrará en una recesión como resultado de las medidas para controlar la inflación, luego de tantos años de una política de “dinero fácil” impulsada por la Reserva Federal. Los más optimistas todavía creen que se puede evitar esa recesión, pero que la economía mundial se desacelerará de 3,2 por ciento en 2022 a 2,7 por ciento en 2023.

En Ecuador, el Banco Central espera que el crecimiento alcance el 3,1 por ciento en 2023. Esto significa que finalmente el PIB superará el nivel registrado en 2018 o 2019. Los tres sectores más dinámicos serán: minería y petróleo con una expansión del 7,2 por ciento, pesca con 5,9 por ciento y camarón con 5,5 por ciento. El resto tendría un crecimiento inferior al promedio de la economía.

Sin embargo, si continuamos creciendo aun promedio del tres por ciento anual, nos tomará 21 años duplicar nuestro PIB per cápita. Y esto sería aún insuficiente para alcanzar el PIB per cápita que tienen actualmente Argentina, Costa Rica o Panamá. Y nos tomará 33 años alcanzar el PIB per cápita que hoy tiene Chile. A este ritmo, las siguientes dos generaciones no gozarán de una economía dinámica capaz de generar oportunidades y bienestar. ¿Qué podemos hacer?

La economía ecuatoriana crece lentamente por insuficiente inversión. La salida a este entrampamiento es transformar radicalmente el entorno para invertir: garantizar seguridad jurídica y respeto al Estado de derecho, eliminar trámites innecesarios y barreras de entrada a nuevos inversionistas, abrir mercados, adoptar una legislación laboral moderna, permitirla competencia internacional en el mercado financiero y liberar el flujo de capitales.En resumen, copiemos lo que ha funcionado en el mundo desarrollado. La verdadera interrogante es: ¿estamos dispuestos a impulsar este cambio?