Joven rusa vende su alma para comprar Labubus

El dinero fue destinado a comprar muñecas de colección y una entrada a un concierto.

Una joven de 26 años en Moscú vendió su alma por 100 mil rublos, equivalente a USD 1.990.
Ilse Herrera Marañón

En Moscú, una insólita transacción ha generado debate en medios y redes sociales: una joven de 26 años vendió su alma por 100 mil rublos (alrededor de USD 1.990 ), dinero que destinó a la compra de muñecas de colección Labubu y a una entrada para asistir a un concierto de la cantante de folk Nadezhda Kádisheva.

El acuerdo fue firmado en papel y sellado con la sangre de la joven.

El comprador fue Dmitri, administrador del canal de Telegram Mash, quien había publicado un anuncio en tono de broma ofreciendo adquirir un alma por esa suma. Para su sorpresa, recibió la propuesta de Karina, la joven que decidió aceptar el trato. Ambos firmaron un contrato que, según se informó, fue sellado con la sangre de ella.

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Tras cerrar el acuerdo, Dmitri compartió en Telegram imágenes del pago y de Karina sosteniendo el documento. En su publicación escribió: “Acabo de comprar mi primera alma. El acuerdo fue firmado con sangre. Me siento Davy Jones, sin lugar a dudas”, aludiendo al personaje de Piratas del Caribe.

El comprador, administrador de un canal de Telegram, dijo que la oferta era una broma.

En declaraciones posteriores, Karina aseguró que no le dio demasiada importancia al hecho, pues “no sabía qué hacer con su alma”. Por su parte, Dmitri confesó que tampoco tiene claro qué hará con ella.

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La historia, que rápidamente se viralizó en Rusia, no tardó en recibir críticas de la Iglesia Ortodoxa, que calificó a la joven como “pecadora” y le aconsejó acudir con urgencia a un psiquiatra. El caso ha reavivado el debate sobre los límites de las bromas en redes sociales y la influencia que estas pueden tener en personas dispuestas a llevarlas al extremo.