Testimonios aseguran que Britney Spears vive en condiciones alarmantes

Testimonios describen un hogar desordenado y un patrón de conductas repetitivas.

Allegados a Britney Spears expresan preocupación por su estado emocional tras el fin de la tutela legal.
Ilse Herrera Marañón

La vida de Britney Spears vuelve a estar bajo la lupa mediática. Diversos testimonios de su entorno cercano, difundidos por el tabloide británico Daily Mail, advierten sobre un presente marcado por tensiones emocionales y dificultades domésticas desde que recuperó su libertad legal en 2021.

Allegados a la artista de 43 años expresaron que la cantante enfrenta un momento de inestabilidad que recuerda episodios pasados de crisis. De acuerdo con las fuentes consultadas, la casa de la intérprete de Toxic atraviesa un desorden constante y preocupa la falta de control en sus rutinas diarias.

Su historial de crisis incluye episodios desde 2007 hasta una intervención médica en 2023.

La preocupación no es nueva. Tras el fin de la tutela de su padre, Jamie Spears, que se extendió por más de 13 años, el comportamiento de la cantante ha generado controversia tanto en círculos íntimos como en la opinión pública. Si bien algunos cercanos aseguran que Britney “se siente bien y disfruta de su libertad”, otros afirman que la situación “es alarmante” y que su futuro es incierto.

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La trayectoria de Spears está marcada por altibajos emocionales. En 2007 protagonizó un recordado episodio al raparse la cabeza después de salir de rehabilitación; en 2008 fue internada en un hospital psiquiátrico, lo que dio inicio a la tutela que controló sus finanzas y decisiones personales. Según documentos judiciales, Jamie Spears aseguró entonces que los problemas de salud mental y adicciones de su hija eran “más graves de lo que se conocía públicamente”.

En mayo de 2023, volvió a ocupar titulares tras ser vista descalza y envuelta en una manta mientras recibía asistencia médica fuera del hotel Chateau Marmont, en Los Ángeles, acompañada de su exnovio Paul Richard Soliz.

La relación con sus hijos permanece distante y cargada de tensiones.

Desde que recuperó el control de sus redes sociales, la artista ha compartido constantemente videos y fotografías de tono provocador. Bailes con cuchillos, imágenes sin ropa y publicaciones polémicas han reforzado la percepción de inestabilidad, generando preocupación entre seguidores y familiares.

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Aunque algunos conocidos afirman que Britney está viviendo su libertad “a su manera”, otros insisten en que su bienestar emocional continúa siendo una incógnita.