Caso Matthew Perry: médico se declara culpable de por distribuir la droga que causó la muerte del actor
El médico enfrenta hasta 40 años de prisión tras admitir que aprovechó la adicción del actor para lucrarse.
Casi dos años después de la trágica muerte del actor Matthew Perry, conocido por su papel como Chandler Bing en la serie “Friends”, la justicia avanza en el caso que reveló una red de tráfico y abuso médico de ketamina en Hollywood. Este 23 de julio, el principal implicado, el doctor Salvador Plasencia, se declaró culpable ante la Corte Federal de EE. UU., reconociendo su participación en la distribución ilegal del anestésico disociativo.
Plasencia, de 43 años, admitió haber suministrado personalmente ketamina a Perry en su domicilio semanas antes de su fallecimiento, ocurrido el 28 de octubre de 2023. Según la acusación fiscal, el médico aprovechó la dependencia del actor a esta sustancia, presuntamente usada con fines terapéuticos contra la depresión, para lucrarse con su adicción. El profesional enfrenta hasta 40 años de prisión por cuatro cargos relacionados con el uso indebido de recetas y distribución de ketamina.
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La fiscalía reveló que Plasencia, quien no fue el proveedor del frasco que causó la sobredosis mortal, desempeñó un papel central en el esquema. En un mensaje de texto obtenido durante la investigación, el médico escribió: “Me pregunto cuánto va a pagar este idiota”, en aparente referencia a Perry. El acuerdo de culpabilidad detalla que entre septiembre y octubre de 2023, Plasencia distribuyó 20 frascos del medicamento al actor, cobrando hasta 2.000 dólares por cada uno, cuando el valor real para los médicos rondaba los 12 dólares.
Además de Plasencia, otros involucrados ya enfrentan cargos: el doctor Mark Chávez confesó haber suministrado ketamina ilegalmente a Perry y podría recibir una condena de hasta 10 años de cárcel. También fue imputada Jasveen Sangha, conocida en los círculos de Hollywood como la “reina de la ketamina”, quien habría vendido el frasco que provocó la muerte del actor. Esta ciudadana estadounidense-británica enfrenta cadena perpetua.
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El juicio contra Plasencia está programado para el 3 de diciembre de 2025, en medio de un proceso que ha dejado al descubierto las fallas en el control de medicamentos usados en tratamientos experimentales para la salud mental.