CITES CoP20: Por qué Ecuador pide proteger las iguanas terrestres y marinas
Las Islas Galápagos, declaradas Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO, albergan algunos de los reptiles más extraordinarios del planeta.
En las islas Galápagos habitan las iguanas terrestres y marinas. Están en peligro porque las trafican a destinos lejanos, como Uganda, donde se convierten en mascotas. Por eso, es urgente que en la cita internacional se escuche el planteamiento oficial de Ecuador.
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Están entre los reptiles más extraordinarios del planeta. Sin embargo, las iguanas salen del territorio ecuatoriano, incluyendo Galápagos, para ser traficadas hacia destinos lejanos. Por eso, Ecuador lleva una propuesta firme a la Conferencia de las Partes de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Flora y Fauna Silvestres (CITES). Plantea que las iguanas terrestres y marinas de Galápagos alcancen el nivel más alto de protección internacional.
Eso implica transferir la clasificación de ambas especies del Apéndice II al Apéndice I, de la CITES. Con este cambio, quedará prohibido el comercio. La decisión además salvaguardaría a los reptiles, explicó la organización internacional Wildlife Conservation Society (WCS). La entidad, que ha trabajado por años en la conservación de especies amenazadas en territorio ecuatoriano y en Galápagos, expresó a través de un comunicado su firme apoyo a la posición ecuatoriana.
La cita se realiza en Samarcanda (Uzbekistán), desde el pasado 24 de noviembre y concluirá el 5 de diciembre. La propuesta 23 aborda la sugerencia para la protección de iguanas terrestres de Galágagos. La propuesta 22, en cambio, se refiere a la iguana marina de Galápagos.
Las Islas Galápagos, declaradas Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO, albergan algunos de los reptiles más extraordinarios del planeta, incluida la única especie de lagarto que se alimenta en el océano —la iguana marina (Amblyrhynchus cristatus)— y tres especies de iguana terrestre (Conolophus spp.), incluida la rara iguana rosada, que solo habita en las laderas del volcán Wolf. Cada una desempeña un papel esencial para mantener el equilibrio ecológico del archipiélago que inspiró la teoría de la evolución de Charles Darwin hace casi dos siglos, explicó WCS.
“CITES funciona mejor cuando los gobiernos actúan antes de que las especies estén al borde del colapso”, dijo Susan Lieberman, vicepresidenta de política internacional de WCS. “Las propuestas de Ecuador para trasladar a las iguanas de Galápagos al Apéndice I reconocen las amenazas serias y crecientes que enfrentan —desde el cambio climático hasta depredadores invasores y el comercio ilegal—. Éste es exactamente el tipo de acción precautoria para la cual se creó CITES”.
Las iguanas marinas, únicas entre todos los reptiles vivos, se alimentan de algas en las frías aguas de Galápagos, según WCS. Sus poblaciones fluctúan dramáticamente durante los eventos de El Niño, cuando el calentamiento de los mares altera las fuentes de alimento y puede causar hasta un 90% de mortalidad en algunas colonias. También son vulnerables a la contaminación, derrames de petróleo y los impactos del turismo y el desarrollo costero. Aunque Ecuador ha prohibido la caza y exportación de iguanas marinas desde 1959, el comercio ilegal de crías y juveniles continúa, y algunos individuos llegan a alcanzar altos precios en el mercado internacional de mascotas.
Las iguanas terrestres de Galápagos enfrentan presiones similares, cita WCS. La iguana rosada (Conolophus marthae) se conoce únicamente de una pequeña población de menos de 200 individuos maduros, mientras que las otras dos especies permanecen fragmentadas y vulnerables ante depredadores invasores como gatos y ratas silvestres, según la organización. “Estas iguanas son fundamentales para el funcionamiento ecológico de sus islas, ya que dispersan semillas y consumen vegetación, moldeando las comunidades de plantas de las que dependen otras especies”.
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“Cada una de estas iguanas cuenta una historia evolutiva única”, dijo Sebastian Valdivieso, director nacional del programa de WCS Ecuador. “Han sobrevivido a erupciones volcánicas, sequías y aislamiento durante milenios, pero ahora enfrentan amenazas que no pueden superar solas. Una inclusión en el Apéndice I cerrará la puerta al comercio comercial y brindará a los socios de conservación un marco legal más sólido para protegerlas”.
La petición ecuatoriana se basa también en un hito ciudadano sin precedentes, explicó el abogado Milton Castillo. Fue una lucha jurídica casi en solitario, a la que se sumó el periodista Franklin Vega. “Presentamos una acción de protección a favor de las iguanas y tortugas galápagos que derivaron en una sentencia favorable”.