Investigación definirá si vocal del BIESS cometió tráfico de influencias

Gabriela Pinasco
Investigación definirá si vocal del BIESS cometió tráfico de influencias

Una investigación en curso confirmará si hubo tráfico de influencias o uso de información privilegiada por parte del actual miembro del directorio del Banco del Instituto de la Seguridad Social (BIESS), Wilmer Darío Cóndor. El vocal representa a los afiliados; se posesionó en abril de 2019, luego de un concurso organizado por el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) transitorio.

La actuación del miembro del directorio quedó en entredicho en noviembre. Esto, tras la revelación de que Cóndor, contador y auditor de profesión, tiene relación de consanguinidad con personas que dirigen varias empresas privadas que brindan servicios de asesoría y consultoría en temas tributarios, laborales y de seguridad social.

Precisamente, una de estas empresas solicitó a un centro comercial del sur de Quito entregar en arrendamiento un espacio para habilitar un balcón de servicios y asesoría en trámites. Ese día, el directorio del BIESS autorizó abrir la oficina del Monte de Piedad del sur de Quito, en el mismo centro comercial.

La información alertó a la Asociación de Afiliados, Jubilados y Pensionistas del IESS, de Pichincha. En un oficio de siete páginas, emitido el 18 de noviembre, solicita investigar “un posible tráfico de influencias o manejo de información privilegiada en beneficio de una empresa privada, en la que supuestamente sería socio un miembro del directorio del BIESS”. El documento está dirigido a la presidencia del CPCCS, a la Superintendencia de Bancos, a la Contraloría del Estado y a la presidencia de la comisión de Fiscalización de la Asamblea.

El 18 de diciembre, el presidente del directorio del IESS, Jorge Wated, escribió en su cuenta de Twitter que el tema fue conocido por el directorio del BIESS, que solicitó un informe al respecto. Los resultados, anticipó, se informarán al ente responsable del nombramiento del vocal.

Hallazgos
Wilmer Darío Cóndor aparece en los registros de la Superintendencia de Compañías como actual accionista en Bragger Commerce Ability Professional Condor, constituida en 2003. La empresa brinda “asesoramiento total en área contable, tributaria, laboral”. En el historial de administradores, figura como exgerente y como expresidente, cargos en los que alternó con su esposa, también contadora, Verónica Vilaña Trujillo, quien es la actual gerente general.

Como accionista de Bragger aparece una de sus cuñadas, Gisella Vilaña Trujillo. Y como presidente figura su también cuñada, Andrea Carolina Vilaña Trujillo. En los registros tributarios, Andrea Carolina Vilaña aparece con un registro único de contribuyentes (RUC) activo. El nombre comercial inscrito es “B-Cont, Balcón de Servicios Contables y Asesoría Integral”, ubicado al norte de Quito.

Al mismo tiempo, ella es representante legal de SRTRI (Servicios Tributarios Integrados) que funciona en la planta baja de la plataforma financiera, donde el BIESS y el IESS mantienen oficinas. El número telefónico que registra esta firma corresponde a BCA. Este número fue suspendido un día antes de la reunión del directorio del BIESS, en la que se conoció la carta de la asociación de jubilados.

La dirección en la que funciona Bragger es idéntica a la reportada por la empresa Boletín Contable Administrativo (BCA). En las bases de datos del Servicio de Rentas Internas (SRI), BCA está relacionada con Wilmer Cóndor.

El 15 de octubre, mediante un correo electrónico, el directorio del BIESS fue convocado a una reunión virtual previa a la sesión de directorio. El único punto del orden del día era el conocimiento y resolución del traslado del Monte de Piedad Quito Sur. El representante de los afiliados al directorio fue uno de los destinatarios del correo. Según la investigación, el vocal Cóndor pidió copia de los planos del local que el BIESS decidió rentar en el centro comercial.

El 26 de octubre, el directorio formalizó la autorización el traslado. El mismo día, Andrea Carolina, cuñada del miembro del directorio, solicitó a la administración del centro comercial el alquiler de un espacio para instalar un balcón de servicios varios, entre ellos, trámites del BIESS y el IESS. La petición la presentó a favor de BCA, empresa con 15 años de experiencia, pero advirtió que el nombre comercial que usaría sería B-Cont Balcón de Servicios Contables.

Vistazo intentó por varios días solicitar la versión al miembro del directorio. En una entrevista previa, negó tener conocimiento de estos hechos y advirtió que por su profesión ha constituido varias empresas.