Guayaquil dedicó una melodía inmortal al artista Diego Gallardo, 'Aire del Golfo'
Un tributo al arte y a la emoción. Cientos se congregaron el sábado 3 de febrero de 2024, en el Palacio de Cristal de Guayaquil para el Concierto Homenaje de Diego Gallardo o "Aire del Golfo", como se lo conocía al artista guayaquileño en la escena musical.
Familiares, amigos y admiradores se congregaron a las 16h00 para recordar el legado musical de Gallardo, en un evento que estuvo lleno de arte y amor.
Con los últimos rayos del atardecer, las canciones de Aire del Golfo resonaron en el recinto de la mano de varios intérpretes, desde Daniel Gallardo, su hermano, hasta la melodiosa voz de Camille Gamarra, su esposa.
En ese crisol de talento, Anna Belén, Alex Eugenio, Pechiche Mena, El Cholo, Luis Saenz, Pablo Alberto, Luz Pinos, Vivianna, Juan Carlos Coronel, Majo Chancay, García Anda y otros más, pintaron el escenario con los colores de la nostalgia.
Daniel Gallardo, al concluir el evento, dedicó unas palabras a su hermano que conmovieron a los presentes: "Él está aquí y nunca va a dejar de estar aquí". El mensaje resonó en una audiencia emocionada hasta las lágrimas, donde cada nota de "Que bonito que esto suena" era coreada con afecto.
A su vez, Camille expresó su gratitud por los mensajes de apoyo que ha recibido desde la abrupta partida de Gallardo, el 9 de enero de 2024 cuando la delincuencia acabó con la vida del cantante. Aseguró que su esposo fue fuente de inspiración no sólo para ella, sino también para gran parte de los artistas ecuatorianos.
¿Quién era Diego Gallardo, conocido como Aire del Golfo?
En el concierto se realizó el lanzamiento del álbum "Dejar Zumbar 2" y se presentó a los fans la canción inconclusa de Gallardo en homenaje a la ciudad: "De Guayaquil". Los artistas compartieron su deseo de que la canción se sintiera como "una canción de culto, como si de ir a la iglesia se tratara", revelando la espiritualidad que siempre acompañó a Diego.
Otro momento emotivo fue cuando Luca, hijo de Diego, formó parte de la banda unos instantes y cumplió su sueño de “estar junto a su padre en la música”.
Los asistentes, rodeados de la calidez de amigos y familiares de 'Aire del Golfo', experimentaron un caleidoscopio de sentimientos. La tarima, al finalizar, se tornó en un altar lleno de abrazos, recordando al maestro al ritmo de sus temas.
La zona tributo, con la esencia de Diego impregnada en cada objeto, desde sus característicos atuendos hasta retratos íntimos, reveló la profundidad de su legado. Entre sus pertenencias, destacaba su micrófono, testigo de tantas historias compartidas en el escenario.
El concierto, que abarcó un lapso de 5 horas, no solo fue un tributo musical, sino también un gesto de solidaridad. Los ingresos obtenidos de la venta de las camisetas, bolsos, y otros objetos, serían destinados a las tres familias afectadas el fatídico 9 de enero, transformando el duelo en un acto de amor y apoyo.
Así, entre notas y recuerdos, el Concierto Homenaje de Aire del Golfo se convirtió en un capítulo emotivo de la escena musical guayaquileña, donde la música y las emociones se entrelazaron en un abrazo eterno.
