Muerte de Miguel Uribe Turbay: Ecuador condena el atentado que acabó con la vida del presidenciable colombiano
El asesinato de Uribe Turbay ha reavivado el temor de que Colombia reviva la violencia política de finales del siglo XX.
El Gobierno de Ecuador lamentó este lunes el fallecimiento del precandidato presidencial colombiano Miguel Uribe Turbay, suscitado dos meses después de recibir tres disparos mientras encabezaba un mitin en un barrio de la ciudad de Bogotá.
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“Ecuador condena y rechaza firmemente toda forma de violencia y se une al llamado a la solidaridad y a la unidad en la región”, declaró la Administración del mandatario Daniel Noboa, extendiendo condolencias a los seres queridos del senador y “a todo el pueblo de la República de Colombia”.
El legislador de oposición falleció a la 01H56 locales luego de sufrir una nueva hemorragia cerebral el sábado, en la clínica Fundación Santa Fe, en la que permanecía hospitalizado desde el día del ataque y en donde su estado nunca dejó de ser crítico.
El pasado 7 de junio, encabezando un discurso frente a ciudadanos, en el barrio La Mordelia, en el occidente de Bogotá, el aspirante presidencial recibió dos disparos en la cabeza y uno en la pierna izquierda por parte de un sicario de 15 años que permanecía oculto entre la audiencia.
Desde entonces, las autoridades colombianas han detenido a seis personas que estarían vinculadas al ataque, entre ellos el gatillero, y han señalado que miembros una disidencia de la extinta guerrilla de las FARC posiblemente serían los autores intelectuales.
"El mal todo lo destruye, mataron la esperanza. Que la lucha de Miguel sea luz que ilumine el camino correcto de Colombia", escribió en X el expresidente colombiano Álvaro Uribe, quien lidera el partido Centro Democrático, del que Uribe Turbay formaba parte.
Colombia, estremecida por el asesinato
El asesinato de Uribe Turbay ha reavivado el temor de que Colombia reviva la violencia política de finales del siglo XX, cuando en la campaña de 1990 fueron asesinados tres aspirantes presidenciales: Luis Carlos Galán, Bernardo Jaramillo Ossa y Carlos Pizarro Leongómez.
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Desde diversos sectores —incluidos los actuales precandidatos presidenciales— se han lanzado llamados a un gran acuerdo nacional que garantice que las elecciones de 2026 transcurran en un clima de respeto y libres de violencia.