Fracaso

Editorial

Según un análisis del periódico canadiense The Globe and Mail, hecho a la muerte de Fidel Castro, Cuba no le debía nada a su régimen. Antes de la Revolución Cubana, el país asignaba 4.1 por ciento de su PIB para educación, 78 por ciento de su población sabía leer y escribir y tenía más doctores por mil habitantes que Noruega, Suecia y Gran Bretaña. Su PIB per cápita era de 2.363 dólares, superando a Brasil. Hoy, sus habitantes tienen educación y salud gratuita pero ganan unos 25 dólares al mes. Todos son pobres. Su balanza comercial tiene un déficit de 7 mil millones de dólares, y esto a pesar de que ha venido recibiendo unos cien mil barriles diarios de petróleo venezolano a precios subsidiados. En el pasado, su vaca lechera fue la Unión Soviética, que le entregaba en combustibles y otros subsidios unos 5 mil millones de dólares al año. Parte importante en sus ingresos actuales son los 3.350 millones en remesas que envían los cubanos desde Miami, principalmente. No hay cálculos del ingreso que el gobierno confisca a los médicos y otros profesionales exportados “a países amigos”.
 
Cuba ha argumentado que su crisis se debe al embargo impuesto por Estados Unidos. El embargo ha sido, en realidad, la muletilla política del régimen para justificar su ineficiencia. El modelo del estado central planificador de la economía fracasó estrepitosamente donde se instaló, como ocurrió a fines del siglo pasado con la Unión Soviética y los países del este de Europa. El control económico únicamente creó una casta privilegiada llamada la nomenklatura, compuesta por los miembros del partido comunista, y justificó el culto a la personalidad y la tiranía, que se replicó y subsiste en Cuba. Sin embargo, no generó riqueza ni mejoró las condiciones de vida de sus habitantes. Cuando el comunismo sederrumbó en Europa, significó hambruna y penurias en Cuba hasta la llegada de Hugo Chávez al poder en Venezuela. La tabla de salvación del régimen cubano fue la soga con que Chávez y su sucesor Nicolás Maduro ahorcaron a Venezuela.
 
En 20 años de chavismo, el país más rico de América del Sur, que posee las mayores reservas de petróleo del mundo, se convirtió en un erial. De producir 3 millones de barriles al día, hoy produce la mitad, millón y medio de barriles. De un ingreso per cápita de 11.200 en 1998 bajó a 3.300 en 2018. De una deuda externa de 30.500 millones, al llegar el chavismo hoy se ubica en 150 mil millones. Todo esto en los años de la mayor bonanza petrolera en su historia. Como consecuencia del desastre económico y político han emigrado más de cuatro millones de venezolanos, muchos de los cuales mendigan en las principales capitales de América Latina.
 
La historia ha probado, a costa del sacrificio de millones de seres humanos, que el modelo comunista o socialista del siglo XXI es un fracaso. Solo enriquece a quienes en nombre de los pobres dicen gobernar. No se puede respaldar regímenes autoritarios, corruptos y despilfarradores. Los pueblos que lo hacen desconocen la historia y quien desconoce la historia está condenado, como decía el filósofo George Santayana, a cometer los mismos errores.