Valie Export se reinvindica en una muestra como pionera feminista: "Hoy me arrestarían"

La exposición, llamada "VALIE EXPORT. Retrospectiva", tiene como foco principal la relevancia de la fotografía para el trabajo feminista.
Redacción Hogar
La exposición, llamada "VALIE EXPORT. Retrospectiva", tiene como foco principal la relevancia de la fotografía para el trabajo feminista.

Valie Export, la artista feminista que hace ya seis décadas denunció la sociedad patriarcal con su arte, presenta en el Museo Albertina de Viena una retrospectiva sobre su obra, que sigue siendo hoy día tan rompedora y provocadora como entonces.

"Hoy en día, seguro que me arrestarían", declaró EXPORT en la presentación a los medios de una muestra que se inaugura oficialmente mañana.

"Lo que hacía antes era arte y la gente se reía, miraba o le parecía curioso, pero el arte estaba más liberado y se entendía que los artistas podían expresarse de diferentes formas aunque fueran dificiles de entender", añade VALIE EXPORT, nombre artístico de Waltraud Lehner.

La exposición, llamada "VALIE EXPORT. Retrospectiva", tiene como foco principal la relevancia de la fotografía para el trabajo de la artista desde 1966 hasta 1998, un periodo en el que muchas veces ella fue modelo de su propio trabajo, así como el arte corporal femenino, el cine experimental y sus provocativas performances.

Dos de sus performances más transgresoras a finales de la década de 1960 fueron "Pánico genital", en la que la artista se paseó entre los asientos de un cine con un arma en la mano y mostrando su bello púbico, y "Cine para palpar", en la que llevaba una caja sobre el pecho e invitaba a los transeúntes a meter las manos para que se los tocaran.

ROMPER CON LOS ROLES DE GÉNERO

Al principio, cuenta EXPORT, le parecía "curioso" que la gente preguntase a sus colegas hombres por su obra. Eso le provocó la necesidad de criticar el fuerte machismo que vivía la sociedad austríaca de los 60. "Yo pensaba, 'esto no puede funcionar'. Si preguntan a los hombres lo que yo estoy haciendo es que algo falla en esta sociedad'".

"El archivo de la condición canina" es una de las performances con las que mejor ilustró esa situación. EXPORT sacó a pasear con una correa a su entonces pareja, el artista Peter Weibel, como si fuera un perro, lanzando con ello un mensaje de rebelión.

En el año 1970, la artista se tatuó en público en Frankfurt la hebilla de una liga en el muslo, que representa el fetiche de las fantasías sexuales masculinas, y con ello criticó la sexualización del cuerpo femenino.

En la exposición, una fotografía muestra el tatuaje en el muslo junto a genitales. EXPORT se dedicó durante muchos años de su vida a reivindicar la imagen de la mujer con una identidad propia, alejada de los roles de género impuestos por la sociedad que, afirma, "se reflejan dolorosamente en el cuerpo femenino".

En su afán de expresar sus pensamientos feministas, nunca dejó de innovar: hizo desde cine hasta literatura feminista, pintura urbana, utilizó su propio cuerpo como medio de expresión... Pero, sobre todo, se aferró al poder de la fotografía para documentar, experimentar y como obra de arte independiente.

SU NOMBRE

VALIE EXPORT nació en 1940 en Linz con el nombre de Waltraud Lehner, pero en 1967 se lo cambió a VALIE EXPORT como concepto artístico y logotipo, con la obligación de siempre escribirlo en mayúsculas.

"Cambiar mi nombre fue una necesidad absoluta para oponerme a las reglas, al nombre del padre, al nombre del esposo, para liberarme de todas estas cosas. Lo concebí como un acto de rebeldía", explicó.

PREMIOS Y RECONOCIMIENTOS

Su largometraje "La práctica del amor" fue nominado al Oso de Oro en el Festival Internacional de Cine de Berlín en 1985. Ha participado en cértamenes internacionales de cine y vídeo, como el Festival Internacional de Cine de Londres, el Festival Internacional de Cine de Berlín, de Cannes, Montreal, Vancouver, San Francisco o Hong Kong, entre otros.

Además, en 2019 recibió el Premio Roswitha Haftmann por sus destacados logros en las artes visuales, y en 2022 fue galardonada con el Premio Max Beckmann de Frankfurt.