¿Cómo cuidar tu higiene íntima durante el embarazo?

Revista Mamá y Yo

Puedes notar un cambio en el flujo vaginal y esto es también efecto del ajuste hormonal por el embarazo. La embarazada notará este cambio, con la presencia de un flujo claro y lechoso, que se asemeja al que se presenta antes del período menstrual, pero más abundante. Pueden incluso percibir cierto cambio en el olor corporal, todo es parte de la revolución hormonal que está experimentando el cuerpo. Además, esta mucosa es parte de un ecosistema habitado por lactobacilos, que son microorganismos que se encargan de mantener un pH correcto, para evitar así las infecciones.

CONSEJOS

1.- Realiza tus lavados vaginales de manera regular, como siempre lo has hecho, no es necesario aumentarlos, pues correrías el riesgo de cambiar tu pH vaginal.

2.- No utilices cualquier jabón, existen aquellos especiales para la higiene íntima que te garantizan no alterar el pH vaginal ni producirte ningún tipo de irritación o molestia.

3.- Las esponjas no son recomendables, suelen acumular gérmenes y humedad, propicia a hongos y bacterias.

4.- Tras tu lavado o tu ducha, pon especial atención en el secado de la zona, no descuides los pliegues donde puede quedar humedad y crear el campo ideal para la presencia de hongos vaginales.

5.- Algo que lo sabemos, te lo reiteramos, al ir al baño siempre debemos limpiarnos de adelante hacia atrás, de otra manera, podríamos arrastrar bacterias fecales hacia la vagina y provocar infecciones.

SI FUERA ALGO MÁS...

Si tuvieras una infección vaginal es posible que tengas una picazón intensa en la vulva, un flujo vaginal mucho más abundante, de diferente olor y consistencia. Adicionalmente, puede experimentar ardor al orinar y durante o después de tus relaciones sexuales. Si esto te sucede debes ir de inmediato a tu ginecólogo para que te evalúe y te prescriba un tratamiento. Nunca te automediques.

ALIMENTOS PARA MANTENER SANO TU PH

Agua: mantente constantemente hidratada.

Yogur: gran aporte de probióticos.

Jugo de arándanos: contiene vitamina C, así como ácidos y compuestos que ayudan a prevenir bacterias dañinas para el organismo.

Chía: tiene ácidos grasos esenciales, que eliminan las toxinas que se albergan en el colon y producen bacterias como la Cándida y otras causantes de infecciones vaginales.

Frutos secos: previenen la sequedad vaginal y al ser ricos en vitamina W, actúan beneficiando una sana lubricación íntima.