Instituto Geofísico advierte sobre riesgos asociados a una posible erupción del volcán Cotopaxi

El aumento en la actividad sísmica y la emisión de gases podrían desencadenar lahares y otros fenómenos que afectarían comunidades cercanas y requieren preparación inmediata.

Vista panorámica del volcán Cotopaxi con cielos despejados.
Karelys Rincón

El Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IG-EPN) ha emitido una alerta indicando que, ante la posibilidad de una erupción del volcán Cotopaxi, podrían darse daños significativos, principalmente por la generación de lahares que se desplazarían por quebradas y ríos a alta velocidad, arrasando lo que encuentren a su paso.

Según la información oficial, los principales riesgos incluyen:

Medidas oficiales y recomendaciones de prevención

El IG-EPN junto a la Secretaría de Gestión de Riesgos y Emergencias (SNGRE) y otras entidades han instado a la población a tomar medidas de precaución, conforme a los protocolos ya establecidos. Entre ellas: preparar un plan familiar de emergencia, tener lista una mochila con suministros básicos, identificar rutas de evacuación, y mantenerse informado mediante fuentes oficiales.

Además, se enfatiza la necesidad de fortalecer el monitoreo en tiempo real tanto de la actividad interna del volcán (sismicidad, deformación, emisión de gases) como de los fenómenos superficiales. Se recuerda que los escenarios pueden cambiar rápidamente ante nuevas señales volcánicas.

¿Quiénes podrían estar afectados?

Las zonas cercanas al volcán, especialmente aquellas ubicadas en los cauces de quebradas y ríos que descienden de Cotopaxi, estarían en mayor riesgo en caso de activarse la erupción. Comunidades en las provincias de Cotopaxi, Pichincha y Napo podrían enfrentar impactos directos por ceniza, gases y lahares.

El Instituto Geofísico mantiene una vigilancia constante sobre el Cotopaxi y recuerda que, aunque actualmente la actividad interna y superficial es baja, la posibilidad de fenómenos asociados como lahares exige preparación. Las autoridades llaman a usar la alerta amarilla como oportunidad para organizarse, ajustar los planes de emergencia y capacitar a las comunidades en riesgo.