La obra "Los mulatos de Esmeraldas" vuelve a España

Agencia EFE
La obra pictórica es una pieza única al estar firmada por el autor, algo insospechado en la época. Foto: Ministerio de Cultura.

El Museo Nacional (MuNa) de Ecuador anunció que la obra virreinal "Los mulatos de Esmeraldas", pintada por Andrés Sánchez Gallque en 1599 y que se expuso en Quito desde mayo pasado, volverá la próxima semana a España, donde reside.

Justamente, el domingo será el último día de la temporada de exposición en el MuNa de Quito del lienzo elaborado hace 420 años y que retrata el cimarronaje que se dio en la época colonial, con hombres libertos africanos que se asentaron en lo que hoy es la provincia de Esmeraldas.

Más de 15.000 personas visitaron el Museo Nacional desde que comenzó la exhibición al público del lienzo, el pasado 18 de mayo.

Este cuadro fue colocado en un área adecuada para el efecto en el Museo Nacional, situado en el complejo arquitectónico de la Casa de la Cultura Ecuatoriana en Quito.

La llegada a Ecuador de la obra se produjo gracias a una alianza estratégica entre el Ministerio de Cultura y el MuNa de Ecuador, con los museos de El Prado y América de Madrid, bajo el apoyo de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI).

La exhibición de la obra virreinal constituyó un hito en la historia museística de Ecuador, ya que se trata de una pintura que retrata y confirma el cimarronaje que se dio en el país en la época colonial.

Sánchez Gallque, un prestigioso pintor indígena, realizó el cuadro en 1599 como evidencia de un pacto con los líderes negros de Esmeraldas para la pacificación de la región, obra que fue entregada directamente al rey Felipe III de España como constatación de los acuerdos.

Además, la obra, es una pieza única al estar firmada por el autor, algo insospechado en la época, según varios historiadores que han comentado sobe la trascendencia de la pintura.

Y es que el MuNa organizó una agenda cultural intensa para exhibir el cuadro, que incluyó conferencias de historiadores como Susan Webstern, Carmen Fernández Salvador y Rocío Rueda, además del antropólogo del Museo de América Andrés Gutiérrrez Usillos, y el decimero o juglar Límber Nazareno.

Tras concluir este domingo la exhibición de la famosa pintura, comenzará un riguroso proceso de desmontaje e inspección del estado de conservación de la obra patrimonial, para su embalaje y traslado al Museo de América de Madrid.

La directora del MuNa, Ivette Celi, aseguró en mayo pasado, cuando llegó a Quito el cuadro desde España, que ese acontecimiento era como "recibir un pedazo de la memoria, un pedazo del pasado, de ese pasado que nos demuestra que este es un territorio complejo y diverso".

Con esta exhibición, dijo entonces Celi, el Museo Nacional pretende mostrar la "historia de los fenómenos sociales del país" para "empezar a construir nuevas lecturas de la historia" nacional. E