Lo que pasó desde el presunto ataque químico en Siria

AFP
Lo que pasó desde el presunto ataque químico en Siria

Estos han sido los últimos acontecimientos desde el presunto ataque químico el 4 de abril a Jan Sheijun, en el noroeste del país, atribuido al régimen de Bashar Al Asad.
 
Asad declaró el miércoles que el ataque fue un "invento al 100%" y que sirvió de "pretexto" para justificar los bombardeos estadounidenses contra el ejército sirio. El mandatario agregó además que su régimen no posee armas químicas.
 
El ataque
 
El 4 de abril un bombardeo aéreo contra la ciudad rebelde de Jan Sheijun, en la provincia de Idlib, causa al menos 87 muertos, entre ellos 31 niños, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
 
Para el OSDH se trata del segundo "ataque químico" más mortífero desde el llevado a cabo en los alrededores de Damasco en 2013, que causó más de 1.400 muertos.
 
Según los médicos en el lugar, los síntomas de los pacientes son parecidos a los constatados en las víctimas de otro ataque químico, es decir pupilas dilatadas, convulsiones y la espuma que sale de la boca.
 
La oposición y los países occidentales acusan al régimen de Bashar Al Asad de haber usado "obuses conteniendo gas químico", lo que Damasco niega. El ejército sirio niega "categóricamente haber usado cualquier sustancia química o tóxica".
 
El ataque genera una ola de indignación internacional y varios países occidentales ponen en entredicho el régimen de Asad. La Casa Blanca denuncia un "acto odioso del régimen". París sugiere "la responsabilidad" de Asad.
 
Las acusaciones
 
El 5 abril, Rusia acude en ayuda del régimen de Damasco. El ministerio de Defensa dice que la aviación siria bombardeó "cerca de Jan Sheijun un gran depósito terrorista" que albergaba "un taller de fabricación de bombas, con sustancias tóxicas".
 
La Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que ciertas víctimas del presunto ataque químico en Siria presentan síntomas que sugieren la exposición a una categoría de productos químicos, como "agentes neurotóxicos". Médicos Sin Fronteras (MSF) habla de "un agente neurotóxico del tipo gas sarín".
 
"Todas las pruebas que he visto sugieren que fue el régimen de Asad (...) usando armas ilegales contra su propio pueblo", asevera por su parte el ministro británico de Exteriores, Boris Johnson.
 
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, tilda a Asad de "asesino" al atribuirle el ataque.
 
Trump amenaza
 
El presidente estadounidense, Donald Trump, amenaza con pasar a la acción. "Estos odiosos actos del régimen de Asad no pueden ser tolerados" afirma el mandatario, que admite que su "actitud ante Siria y Asad ha cambiado claramente".
 
El 6 de abril, Rusia dice que Washington carece de información "objetiva", "fiable" y "realista". Vladimir Putin considera "inaceptable" acusar sin pruebas al régimen sirio.
 
El ministro sirio de Exteriores, Walid Muallem, afirma que el ejército sirio "no ha utilizado ni utilizará jamás" armas químicas contra su propio pueblo, "ni siquiera" contra los rebeldes y los yihadistas.
 
El ministro de Defensa israelí, Avigdor Lieberman declara por su parte estar seguro "al 100%" de que el presidente sirio había ordenado directamente el ataque.
 
El secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, anuncia que Washington "contempla una respuesta apropiada".
 
Trump ataca
 
En la noche del 6 al 7 de abril, Estados Unidos lanza 59 misiles de crucero Tomahawk contra una base aérea del centro de Siria, desde dos buques estadounidenses en el Mediterráneo. Trump apela a las "naciones civilizadas" a obrar para que cese el baño de sangre.
 
Rusia condena la operación, calificándola de "agresión contra un Estado soberano".
 
En la ONU, Rusia acusa a Estados Unidos de haber violado la ley internacional. La embajadora estadounidense Nikki Haley amenaza con una nueva acción militar. 
 
El 9 de abril, los aliados del régimen anuncian represalias contra los que en un futuro "agredirán" a Siria. Nikki Haley afirma que no puede haber una solución política con Asad en el poder.
 
Un día después, un portavoz militar estadounidense indica que probablemente había armas químicas almacenadas en la base. Según el secretario norteamericano de Defensa, Jim Mattis, el ataque destruyó "20% de los aviones operacionales" del régimen.
 
El mismo Mattis asegura el 11 de abril que "no hay duda" de que el régimen de Damasco es el responsable del ataque.
 
El ministro turco de Sanidad señala que los análisis efectuados en los heridos permiten confirmar que se utilizó gas sarín.