La Real Academia Española mantiene su postura en contra de términos como “todes”

La RAE se ha pronunciado sobre lo que significa el uso términos como "elle" o "amigue".
Redacción Vistazo
La RAE se ha pronunciado sobre lo que significa el uso términos como "elle" o "amigue".

La Real Academia Española (RAE) institución dedicada a la regularización lingüística en el mundo hispanohablante, se ha pronunciado sobre lo que significa el uso términos como "elle" o "amigue".

En su cuenta de Twitter, la RAE interactúa constantemente con sus seguidores y responde diversas preguntas relacionadas al lenguaje y promueve el hashtag #dudaRAE para poder atender las inquietudes de los usuarios.

El pasado 6 de octubre, uno de los usuarios pregunto a la REA: "Este famoso lenguaje inclusivo ¿es una jerigonza o un galimatías?"

“Jerigonza” es una palabra que define a un lenguaje difícil de entender para las personas que no pertenecen a un grupo en específico. Y “Galimatías” se refiere a la confusión o desorden que, en este caso, podría causar términos fuera de lo habitual.

Ante esta interrogante, la RAE respondió con un concepto de lo que se ha acuñado como lenguaje inclusivo: “Lo que comúnmente se ha dado en llamar ‘lenguaje inclusivo’ es un conjunto de estrategias que tienen por objeto evitar el uso genérico del masculino gram., mecanismo firmemente asentado en la lengua y que no supone discriminación sexista alguna”.

En otras ocasiones la institución ha sido firme en lo concerniente al uso de "e" en lugar de la "o" para distintas palabras como nosotros/nosotres o todos/todes. Estos términos, según quienes defienden el lenguaje inclusivo, se utilizan para todas las personas e incluso para quienes no se identifican con el género masculino.

Algo parecido sucede con el uso de x en lugar de una vocal que denote el género de la palabra. Un usuario en Twitter preguntó a la RAE: “¿Qué pasa con adjetivos como “feliz” cuando se usa el inclusivo plural?¿Lxs chicxs están felices? o ¿Lxs chicxs están felicxs?”.

Antes esto, RAE explicó: “El uso de la letra ‘e’ como supuesta marca de género inclusivo es ajeno a la morfología del español, además de innecesario, pues el masculino gramatical (‘chicos’) ya cumple esa función como término no marcado de la oposición de género”.