Joven dio positivo a una prueba de embarazo, pero en realidad tenía cáncer de ovario en etapa cuatro
Los síntomas aparecieron en el 2019. Halle Pollard, tenía 15 años, cuando comenzó a sentir dolores intensos de espalda. Al acudir al médico, siempre le decían que se trataba de una infección urinaria o ciática.
“Perdí mucho peso, estaba constantemente cansada, no podía ir al baño y tenía dolores de cabeza y fatiga constantes”, relató la joven al medio británico Metro.
Agregó que las molestias eran tan graves que no podía sentarse, recostarse e incluso caminar.
Su madre la llevó a un hospital para que le hagan exámenes, los cuales arrojaron que estaba embarazada. Halle quedó sorprendida porque el resultado era ilógico.
“Sabía que no estaba embarazada. Solo tenía 15 años y sabía que era imposible”, mencionó la mujer a Metro.
Un médico incluso le hizo un ultrasonido, sin embargo, no había ningún bebé en gestación.
La verdad era mucho más grave. Halle en realidad tenía cáncer de ovario y pruebas posteriores revelaron que se había propagado a los pulmones.
“Era la etapa cuatro y se había extendido a mis pulmones. Tenía 42 tumores en mis pulmones y un tumor de 13 cm por 20 cm en mi ovario”.
Halle se sometió a una operación para extirpar su ovario izquierdo, recibió cuatro rondas de quimioterapia y luego de nueve meses logró superar la enfermedad.
“Lo último que quería era que mi apariencia cambiara. Perder el cabello fue muy duro, al igual que no poder hacer las cosas que hacían mis amigos, porque la quimioterapia había destruido por completo mi sistema inmunológico”.
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La joven contó su historia para que se extienda por todo el mundo y así crear conciencia sobre el cáncer de ovario .
“Me gustaría que la gente supiera que le puede pasar a cualquiera. Nunca piensas que vas a ser tú”, manifestó.
Según Testing.com, las pruebas de embarazo detectan la Gonadotropina Coriónica Humana (GCH), una hormona que algunos tipos de cáncer de ovario también pueden producir, lo que genera falsos positivos.
Así mismo, es común que la gente confunda los síntomas de la enfermedad con el embarazo, porque tienen varias similitudes. Aumento del tamaño abdominal, náuseas, vómitos, dolor de espalda, sensibilidad en los senos y cambios en el ciclo menstrual.
