Inglaterra: a una bebé la elogiaban por sus grandes ojos azules, pero era el síntoma de una grave enfermedad
Es la historia de Aretria, una pequeña niña de Inglaterra, quien tiene una tonalidad diferente en sus ojos. Incluso sus padres se mostraron sorprendidos porque nadie más en la familia poseía ese rasgo físico.
A los seis meses del nacimiento, uno de los ojos de la pequeña presentó secreciones. Además, cualquier luz hacía que gritara del dolor, según narró Louise Bice, madre de la menor.
Los padres pensaban que la bebé se había golpeado el ojo con algún juguete, pero las quejas de Aretria continuaban, así que la llevaron a un hospital.
Los exámenes revelaron que la recién nacida padecía glaucoma congénito bilateral, un raro trastorno ocular que daña el nervio óptico y que provoca la pérdida de la vista, especialmente la visión periférica (lateral).
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En junio fue sometida a una cirugía en el Hospital Infantil de Birmingham, en el centro de Inglaterra, pero no hubo buenos resultados. En agosto se realizó otra intervención y, por el momento, los padres esperan el diagnóstico.
Aunque la familia aseguró al medio Mirror que la bebé ya había perdido casi el 100% de la visión en uno de sus ojos.
“Nunca esperé que los ojos grandes y hermosos de Ari fueran algo malo. De repente, un día sus ojos se nublaron; un minuto estaba bien y 15 minutos más tarde había cambiado por completo”, aseguró Bice al medio antes citado.
La madre contó la historia para que otros padres estén atentos y no asuman que los ojos azules y grandes son hermosos porque podría ser una señal de una enfermedad.
“Si alguien hubiera dicho que era raro, que tenía ojos grandes en lugar de lindos, podríamos haberlo revisado, pero ninguno de nosotros sabía que era siquiera una señal de alerta”.
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