Estados Unidos implementará una modificación a su política migratoria a partir de 2025, permitiendo que ciudadanos de nuevos países puedan ingresar a su territorio sin necesidad de una visa. Esta medida busca facilitar los intercambios diplomáticos, económicos y turísticos, fortaleciendo las relaciones con naciones aliadas y confiables en materia de seguridad, así lo informó el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
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El cambio obedece a la expansión del Programa de Exención de Visas (Visa Waiver Program, VWP), una estrategia del Departamento de Seguridad Nacional y el Departamento de Estado que permite a los ciudadanos de países elegibles entrar a EE.UU. por un máximo de 90 días sin requerir una visa formal.
La medida se centra en naciones que han demostrado un bajo riesgo migratorio y altos estándares de seguridad.
Otros países están en proceso de evaluación, como Panamá y Colombia. Además, las autoridades estadounidenses han indicado que estos países cumplen progresivamente con requisitos como la emisión de pasaportes electrónicos, la cooperación en temas de seguridad y el intercambio de información sobre viajeros.
Los ciudadanos que accedan a este beneficio deberán tramitar una autorización previa conocida como ESTA (Electronic System for Travel Authorization), un formulario en línea que reemplaza la visa tradicional y tiene una vigencia de dos años. Aún cuando el proceso es más ágil, las autoridades advierten que no garantiza la entrada, ya que el oficial de inmigración en el puerto de entrada tiene la última palabra.
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Cabe destacar que, de acuerdo con documentos oficiales de agencias gubernamentales como el DHS y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), esta política no solo promueve el turismo y los negocios, sino que también busca optimizar el uso de recursos migratorios, permitiendo a las autoridades enfocarse en viajeros de mayor riesgo.
Además, contribuye a la imagen de apertura y cooperación internacional de EE.UU., especialmente en un contexto donde los lazos estratégicos son clave para la estabilidad global.
Aún no existe una fecha oficial para la inclusión de todos los países considerados, pero se ha informado que el proceso avanza de manera progresiva y depende de la implementación de ciertos mecanismos tecnológicos, así como de acuerdos bilaterales.