En la COP25, la necesidad de unir la lucha climática con la protección de la biodiversidad gana adeptos y un claro ejemplo es que si bien el vacuno es contaminante, también es indispensable.
Se busca equiparar el olor y sabor de la carne vegetal con la animal, a fin de propiciar un mayor consumo de la primera a nivel mundial y combatir la contaminación producida por las vacas.
Motivadas por razones médicas, éticas o generadas por escándalos alimentarios, estas tendencias bio y "sin" (carne, gluten, lactosa, azúcar, sal, grasas, etc) se imponen cada vez más.
La empresa Diageo, propietaria de esta cerveza negra que se fabrica desde 1759, explicó que dejará de usar la ictiocola, una gelatina hecha de vejigas de pescado.