Indonesia levantó una alerta de tsunami el viernes provocada por un fuerte sismo que sacudió la costa sur de la poblada isla de Java, y que llevó a los habitantes a abandonar sus casas.
Un fuerte terremoto de magnitud 7,5 se produjo ante las costas de Papúa Nueva Guinea, informó el Servicio Geológico de Estados Unidos, lo que activó una alerta de posible tsunami.
Los socorristas indonesios intentaban, pese a las lluvias torrenciales, auxiliar a los habitantes atrapados en islas remotas y llegar a los pueblos más aislados, tras el tsunami.
Más de 1.200 personas murieron por el sismo y el tsunami. Los sobrevivientes luchan contra el hambre y la sed y los hospitales locales están saturados por los heridos.