Con apenas 10 años de edad, el pequeño indonesio Arya Permana pesa 192 kilos. Este dato le entrega la lamentable condición de ser "el niño más obeso del mundo".
Un informe destacan que, históricamente, el fenómeno no se ha tratado como un problema de salud pública, al considerarse muchas veces como la consecuencia del estilo de vida de la familia.