Los sobrevivientes del primer ataque nuclear de la historia, el 6 de agosto de 1945, en Hiroshima, describieron el domingo las "escenas del infierno" que habían presenciado.
"Fue un destello blanco plateado", recuerda un nonagenario de Hiroshima sobre el momento en el que EE.UU. lanzó la mayor arma destructiva hasta entonces.