<img src="https://certify.alexametrics.com/atrk.gif?account=fxUuj1aEsk00aa" style="display:none" height="1" width="1" alt="">

Diego Topa llega a Ecuador

viernes, 17 junio 2016 - 04:22
Facebook
Twitter
Whatsapp
Email

Es el ídolo de los más chicos y cuenta a Revista Vistazo cómo es estar desde hace 16 años conquistando a ese público.

Su visita se atrasó más de lo pensado, Diego Topa debía venir a Ecuador a principios de mayo, sin embargo el terremoto hizo que se reprogramen todas las fechas de shows y conciertos en el país. La llegada de Topa será el 18 y 19 de junio, en Guayaquil y luego Quito. “Feliz de volver a poder estar ahí donde me recibieron con tanto cariño, con tanto amor y con tantas cosas ricas”, confía el animador infantil.

Para aquellos que tienen hijos menores de 16 años, no hará falta presentación, de seguro sabrán perfectamente quién es, conocerán las letras de sus canciones, sus juegos, los horarios de su programa, etc. Sobre todo por ese encanto que genera en los niños que no pueden dejar de escucharlo una y otra vez. Pero para los que no saben quién es, aquí va la explicación. Diego Topa es un animador argentino de Disney Junior y lleva 16 años en el canal, desde que éste surgió. Actualmente conduce el ciclo “Junior Express”, donde interpreta al capitán de un monorriel que tiene una banda musical, lo que le permite cantar y bailar como en sus shows en vivo, además de vivir locas aventuras e interactuar con otros personajes.

Topa comenzó como actor, pero de a poco fue encontrando que su lugar era con los niños. Desde el año 2000 sólo se dedica al público infantil. “Mi balance es altamente positivo, muy feliz de ser parte de la empresa que es la número uno para los más chiquitos y poder crecer juntos en esto. Pensá que nací prácticamente con el canal (Disney Junior), que desembarcó en Argentina para toda Latinoamérica. Fue un crecimiento mutuo y me encanta ir de la mano en este camino”, cuenta y además agrega: “Soy un privilegiado de poder trabajar hoy día, poder hacer lo que más me gusta y sentir que esto que sé hacer que es cantar, bailar y sacar sonrisas a los más chiquitos es mi misión en mi vida”.

En esta década y media han variado muchas cosas, los chicos y su dinámica, gustos y maneras de entretenerse también pero para Topa esto no ha sido un inconveniente. “Todo el tiempo cambian las cosas. Tengo que estar al pie del cañón con cada cambio, los chicos vienen cada vez mucho más dinámicos, con poco nivel de concentración, se dispersan rápido. Hay que buscar métodos y formas, que por suerte me sale natural. Es como que hago un update automático del chip de los más chiquitos. Vino conmigo ese software, y me encanta que eso sea así. También tengo muchos chicos a mi alrededor, mis ahijados. Tengo sobrinos de todas las edades de cuatro a 11 años, así que paso por todas las facetas, eso me ayuda mucho”, relata el animador de 41 años, que por ahora no ha formado su propia familia y se pasa de gira en gira y en estudios de grabación.


Diego Topa recibió en 2015 un reconocimiento de
Disney  Junior Latinoamérica por su trayectoria. 

EL ÍDOLO DE LOS NIÑOS

En estos años, Topa se ha convertido en un ícono para las últimas generaciones que lo recordarán como a Xuxa o al Chavo. Diego es consciente de esto y explica lo que significa para él: “Me representa una responsabilidad enorme, me apasiona lo que hago. Yo trabajo 24 horas por día. Ayer estuve haciendo skype con Buenos Aires, hablando de las coreografías, de qué vamos a hacer, qué queremos contar en cada uno de los musicales, estoy con el guión del teatro del próximo año. Estoy metido en todo, a veces ni descanso pero soy tan feliz con lo que hago que me encanta. Estoy con la letra de las canciones y recién corté con el músico hablando de la producción de las canciones del disco que va a salir a mitad de año, así que estoy en constante movimiento, esto es mi vida. Topa no es solamente un programa de televisión, Topa es Topa y soy yo 24 horas”. Pero a pesar del tiempo y energía que le consume, el animador no duda en afirmar: “Me hace muy feliz ser Topa, me pone muy contento levantarme todos los días y ser quien soy porque sé que no solo soy entretenimiento, ayudo a mucha gente, a muchos chiquitos, a entretenerse, a pasarla bien, a chiquitos que están enfermitos y por ahí mi música o los programas los ayudan a salir adelante”.

El ser un ídolo para los más chiquitos lo ha puesto en contacto con historias muy conmovedoras, por ejemplo en un programa de televisión contó el caso de Milagros, una nena argentina que los papás la llevaron a la ciudad de Buenos Aires para operarla y le habían prometido que si todo salía bien iban a ir a ver a Topa al teatro. Pero las cosas salieron mal y los papás tenían que desconectarla pero quisieron cumplir su promesa y lo contactaron después de mucho buscarlo, y él fue a la habitación a cantarle y despedirla. “Todo el tiempo me pasa eso –narra–, la semana pasada unos papás también me pidieron poder comunicarme con una nenita que tenía cáncer y que ya no se podía hacer nada y me pidió que le grabe su canción favorita por nota de voz en whatsapp. Se lo grabé y después los papás me llamaron para contarme que cuando estaba escuchando la canción partió feliz. Así que imagínate que es muy fuerte lo que uno genera con todo esto y es una responsabilidad muy grande”.

¿Cómo maneja las emociones para que no lo afecten demasiado?
Lo transito, tengo un gran equipo de gente a mi alrededor que me acompaña y me contiene, me pongo fuerte porque sé que tengo que seguir para muchos más. Me sensibiliza profundamente, me emociona y también me genera saber que hay cosas que todavía no las entiendo de la vida, de cómo un chiquito pasa por estas situaciones. Es muy fuerte todo, trato de buscar un equilibrio, yo no soy ni cura ni nada, no hago milagros, solamente lo que hago es dar amor y acompañar al que más lo necesita pero desde mi corazón.

¿Extraña el cine y el público adulto?
El público adulto también me acompaña. Yo trabajo para los más chiquitos pero algo pasó desde que estoy en “Junior Express” que se me pegó la familia, el abuelo, el tío, ya estoy para toda la familia. No extraño, estoy feliz en donde estoy porque “Junior Express” ocupa eso que a mí me pasa y cada vez que voy a México y me dicen que desde El Chavo que no había algo así. Yo que soy grande veo El Chavo y me río, creo que “Junior Express” está llegando a un lugar de confianza y diversión asegurada que cumple todas mis satisfacciones.

¿Qué proyectos tiene con el programa?
Para el año que viene vamos a hacer un capítulo de larga duración que es símil de una película, de una hora. Si tengo ganas de hacer cine, obviamente tengo ganas de ser Topa, no quiero hacer un personaje. Hoy, me pasa esto porque los más chiquitos cada vez que me buscan quieren ver a Topa. También en el programa me divierto mucho cuando interpreto a otros personajes, pero los chicos quieren ver a Topa.

Más leídas
 
Lo más reciente