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"Ya que han pasado varios meses y nunca pude identificarlo"

domingo, 26 julio 2020 - 08:12
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* Este testimonio forma parte del especial de Vistazo.com dedicado a quienes fallecieron a causa de la pandemia y cuyos cuerpos desaparecieron por una cadena de negligencias durante los meses más críticos de la emergencia sanitaria en Guayaquil. Fueron más de 200 los cuerpos que tras su último aliento, no pudieron descansar en paz.
 
"Yo no tengo constancia de que esté ahí mi papá, ya que han pasado varios meses y nunca pude identificarlo", señala Sharon Ayala.
 
Ella busca el cuerpo de su papá, Luis Enrique Ayala Campoverde, quien falleció el 30 de marzo a los 70 años en plena crisis sanitaria en Guayaquil originada por la pandemia del covid-19.
 
Aunque el nombre de su papá apareció el 24 de abril en la página de Coronavirus Ecuador y que estaba enterrado en el camposanto de Pascuales, ella todavía no ha podido ingresar al cementerio.
 
"Hasta el día de hoy me acerco a Pascuales, donde supuestamente está sepultado mi papá. N o me dejan pasar, aún no abren y el pretexto de siempre es que están dando mantenimiento", cuenta Ayala.
 
 
Falleció en casa
Su papá guardó la cuarentena desde el 14 de marzo. Desde ese día dejó de trabajar en el taxi que alquilaba.
 
Sus hijos todavía no saben cómo pudo haberse infectado de Covid-19.  Aunque sospechan que pudo haber sido en una de las tres ocasiones que fue al subcentro de salud de Las Orquídeas, al norte de Guayaquil, para un control médico por la tuberculosis que tuvo hace tres años. 
 
"Empezó a tener complicaciones al respirar y llamábamos insistentemente para que enviaran una ambulancia y no vinieron. Escuchamos al otro lado de Las Orquídeas una ambulancia y lo que hicimos fue seguir el sonido desde una moto, pero los paramédicos no se lo quisieron llevar porque decían que no había espacio en el hospital".
 
Un médico particular lo atendió, pero fue tarde. El 30 de marzo falleció en su casa. Días después, el cadáver de su papá fue retirado por criminalística.
 
Luego, la familia tuvo que aislarse.  "Todos nos enfermamos. El 31 de mayo nos dieron el alta médica a cinco integrantes de mi familia", indica Sharon.
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