<img src="https://certify.alexametrics.com/atrk.gif?account=fxUuj1aEsk00aa" style="display:none" height="1" width="1" alt="">

Obras de mayor museo abierto de arte en América Latina pasean por primera vez

miércoles, 1 abril 2015 - 04:29
Facebook
Twitter
Whatsapp
Email

Sao Paulo.- Parte de la colección del parque brasileño Inhotim, el recinto museístico de arte contemporáneo más grande de Latinoamérica en espacio abierto, salió por primera vez de la galería para mostrar en Sao Paulo el momento en el que el arte deja de ser un mero objeto para mezclarse con la propia vida.
 
La exposición "Del objeto para el mundo" es la primera de estas características que se construye fuera del recinto de la localidad de Brumadinho, situada las sierras de la región metropolitana de Belo Horizonte, capital del estado de Minas Gerais, y donde hace nueve años se inauguró el parque museo Inhotim.
 
Casi una década después, el centro paulista Itaú Cultural expone las obras de 29 artistas que van desde los años cincuenta hasta principios de 2000, con la voluntad de ilustrar el movimiento de aproximación que desarrollaron las manifestaciones artísticas para acercarse a la experiencia de lo cotidiano y envolver al espectador.
 
"Nuestra exhibición pretende ilustrar el período en que el arte deja de ser solo un objeto y pasa a existir en la vida", dijo a Efe la curadora de la muestra, Inês Grosso, que comparte la comisaría de la exposición con Rodrigo Moura.
 
 
Un tiempo en el que, en palabras de Grosso, el arte "quiso dejar de ser un objeto encima de un pedestal" y el artista devino "un ser activo, que busca trabajar sobre lo efímero e involucrar a un público que se vuelve participante".
 
Y uno de los primeros giros hacia esta metamorfosis vino de la mano del "neoconcretismo", un movimiento artístico surgido en Río de Janeiro a finales de la década de los años 50 que marcó un antes y un después en la producción cultural del país y cuyos rasgos principales están inmortalizados en la muestra.
 
Caracterizado por defender la sensibilidad y la expresividad del arte, el "neoconcretismo" clamaba a favor de la incorporación del espectador en la obra y de la recuperación del artista como creador, en las antípodas de las actitudes positivistas que hasta entonces tenían tomada la escena cultural.
 
Por eso, con la incorporación del movimiento, la exposición potencia el arte brasileño en el marco internacional, marcado por la evolución de las vanguardias artísticas.
 
Un ejemplo de ello fue el grupo japonés Gutai, surgido durante la posguerra y cuyos principios básicos se asemejaban a los propuestos por la escuela brasileña.
 
"El mundo vivía un marco similar, sumido en la Guerra Fría, y los artistas reaccionaban contra el propio contexto histórico", señaló al respecto Grosso, quien aludió a "Red", el gran cubo de vinilo rojo de Tsuruko Yamazaki que preside una de las salas del museo invitando al público a interactuar con él.
 
Aunque la obra más singular de la muestra sea, posiblemente, "Sección diagonal" de Marcius Galan, un espacio ilusorio que evoca y mezcla dudas y sensaciones entorno a un posible cristal.
 
Al lado de fotografías, vídeos, carteles y centenares de materiales más, la muestra acerca también las raíces del mundo de la "performance" y del "body art", ya que, como señaló la comisaría, "queremos mostrar cómo el campo de formación del arte contemporáneo sigue actual en la producción de artistas más jóvenes".
 
Un recorrido "diferente" e "innovador" que se expuso ya en la ciudad de Belo Horizonte y volverá a Brumadinho el próximo 31 de mayo a la espera que sea invitado por otra ciudad para seguir con su condición de itinerante.
 

Más leídas
 
Lo más reciente