<img src="https://certify.alexametrics.com/atrk.gif?account=fxUuj1aEsk00aa" style="display:none" height="1" width="1" alt="">

¿Hay racismo en las contrataciones laborales?

viernes, 24 marzo 2017 - 03:22
Facebook
Twitter
Whatsapp
Email

    Revisando algunos criterios que se aplican en los procesos de selección  de personal, me encontré con uno que si, afortunadamente,  no es de uso generalizado, sorprende e inquieta: la influencia del racismo.
     
    Parece mentira pero, hay todavía, en algunos países, instituciones y empresas reacias en contratar talentos humanos afro, indígenas o que viven en barrios deprimidos económicamente. Y cuando lo hacen, no solamente les asignan cargos como subalternos, sin real potencial de desarrollo profesional y personal, sino que reciben tratos prepotentes que llegan hasta a la falta de respeto.
     
    ¿Será que el coeficiente intelectual es proporcional al color de la piel, que vivir modestamente pone en duda la honorabilidad o que la humildad nos hace vulnerables a ciertos complejos de superioridad?
     
    Este comportamiento está doblemente equivocado: es pecar por discriminación y olvidar que son, precisamente, estos talentos humanos quienes, por realmente necesitar trabajo, lo valoran, demuestran un gran  afán de superarse y cuidan celosamente su estabilidad laboral.
     
     
    Les cuento que, en la década de los ’80,  era ejecutivo en una importante institución financiera de Caracas, donde, además de numerosos funcionarios, dos de sus Vice - Presidentes eran afro: una situación que, jamás, suscito comentarios, ni positivos, ni negativos, ni adentro, ni  afuera de la empresa. Era lo normal, como debe ser.
     
    Y que contraté como oficinista, en mi división, a un joven bachiller quien vivía en el barrio ‘’ 23 de Enero ‘’, catalogado, en la época, como zona roja donde se decía que ni la policía se atrevía  a entrar. Pues, él supo aprovechar su oportunidad, en menos de 2 años fue ascendido a Supervisor y 3 años después, sus destrezas profesionales y sus cualidades como persona lo llevaron a ocupar una Subgerencia de Departamento. ¿Y quién sabe hasta qué nivel jerárquico habrá llegado?
     
    Estos casos ilustran un principio indiscutible y muy sencillo: si las puertas de una empresa están abiertas para que, por ejemplo, todos los segmentos de la población le confíen su dinero o lo gasten para comprar sus productos o servicios, igualmente deben estar abiertas para ofrecer a todos, la oportunidad de incorporarse y crecer merecidamente en su organización.
     
    Hoy,el respeto al valor humano y a la autoestima debe erradicar definitivamente prejuicios raciales o sociales obsoletos. Todos tenemos derecho a un lugar bajo el sol.

    Más leídas
     
    Lo más reciente